Haciendo Historia N° 6: Madres de Plaza de Mayo

La última dictadura cívico militar que se instauró en el país el 24 de marzo de 1976 llevó a cabo una represión sostenida en el terrorismo de estado y en un plan sistemático de desaparición. El objetivo era claro, romper con el entramado social, romper con la resistencia a las políticas neoliberales que se intentaban implementar y que tuvieron su coronamiento en la década del 90. Era imponer el miedo en la sociedad, el "no te metas", el "algo habrán hecho". Por otro lado era imposible asesinar a 7000, 8000, 10000 personas o 30000 sin recoger el rechazo de la sociedad argentina y de la comunidad internacional, tal como lo expresara Videla en el presente. Por eso era necesario la desaparición. Y el miedo, para quebrar esa resistencia, miedo que se extendió en la sociedad argentina. En ese contexto surge un grupo de mujeres, que comenzaron a conocerse recorriendo cárceles, hospitales, iglesias, oficinas, organismos de derechos humanos, en donde nadie sabía decirle que había sido de sus hijos, donde estaban, que les había pasado, si estaban vivos o muertos. De tanto rodar, de tanto andar, un día en la Iglesia Stella Maris, ya cansadas, Azucena Villaflor propone juntarse enfrente de la Casa Rosada, en la Plaza de Mayo y entregarle una carta a Videla, para saber que pasaba con sus hijos. Videla no las recibió y las Madres hicieron de la Plaza su punto de encuentro semanal. El primero fue el 30 de abril de 1977, un sábado. No había nadie en la Plaza, entonces propusieron los viernes, alguien dijo que viernes era día de brujas, entonces quedó definitivamente los jueves. Luego llegarían las marchas alrededor de la Pirámide de Mayo, cuando la policía intento desalojarlas y les dieron la orden de circular, marchar... y ellas marcharon. Y lo siguen haciendo, desde hace 35 años, años de lucha, de no bajar los brazos, de reclamar justicia, y de construcción social y política.

Asociación Madres de Plaza de Mayo

Martín López